sábado 4 de mayo, 2024
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Tras más de 30.000 dosis administradas a niños MSP solo recibió una notificación de “gravedad”

La marcha de la vacunación de niños en Uruguay contra el covid-19 viene confirmando la evidencia internacional: las dosis son seguras y los efectos adversos son anecdóticos. Incluso son ínfimos en comparación al riesgo de enfermar con el virus. En tanto, entre las más de 30.000 dosis que se llevan administradas a la población de entre cinco y 11 años, el Ministerio de Salud Pública (MSP) recibió una única notificación de “gravedad”, aunque la investigación preliminar concluye que no se trató de una reacción al fármaco y ni siquiera requirió el ingreso hospitalario.
CONVULSIONES
Ocurre que un niño con trastorno del desarrollo sufrió una convulsión. Según fuentes médicas que intervinieron en el caso, el pequeño sufrió un foco epiléptico por primera vez. Eso significa que descubrieron en ese momento que era epiléptico, pero que no habría sido consecuencia de la vacuna. Según las mismas fuentes y los datos que maneja el MSP, el pequeño se recuperó “casi al instante”, fue dado de alta y ni siquiera requirió internación. El cuadro clínico en sí no fue grave. Pero como se hace la consulta a la emergencia médica, el MSP lo tipifica como efecto adverso “grave” asociado a la vacunación (incluso aunque no haya sido por la vacuna, sino que se conoció en el contexto vacunal).
MIOCARDITIS
Estados Unidos llevaba administradas, hasta hace un mes, 8.674.378 dosis pediátricas del laboratorio Pfizer (la misma que aplica Uruguay) en la población de cinco a 11 años. De ese universo, apenas se reportaron 4.249 efectos adversos asociados a la vacunación. Y de esos efectos, solo 100 fueron de “gravedad”. Entre ellos se contabilizaron 12 casos de inflamación del músculo cardíaco (miocarditis). En el momento en que los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades realizaron el reporte, ocho de esos casos ya estaban de alta y los otros cuatro se estaban recuperando. Eso significa que por cada millón de niños vacunados hay menos de dos niños con chances de padecer ese efecto y todos se recuperan sin mayores complicaciones.