viernes 3 de mayo, 2024
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Candidatos sin miedo

Gustavo Varela
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Gustavo Varela

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Por Gustavo Varela
Las elecciones internas de la Argentina, las denominadas PASO, no han hecho más que ratificar un error que algunos dirigentes políticos cometen, como consecuencia de intentar llegar al poder, de cualquier manera.
Los procesos electorales últimamente han adquirido la curiosidad de polarizarse y esa polarización se termina dando generalmente, entre las posturas denominadas “Derecha e Izquierda”.
Confieso que muchas veces, es difícil de poder catalogar de derecha o de izquierda, algunas posturas políticas.
Por ejemplo, decir que es de izquierda el gobierno argentino de acuerdo a las estructuras tradicionales que conocemos, dejaría totalmente absortos a los revolucionarios franceses, sin embargo, es así como se lo reconoce a dicho gobierno.
Pícaramente la izquierda y su prensa adicta cada vez que logra conquistar el gobierno un candidato o partido de derecha, le agregan al término “Derecha” el prefijo “ultra”, como queriendo demonizar, o mostrarlo como extremista para estigmatizarlo, en cambio cuando el poder lo gana alguien de izquierda, jamás se va a ver escrita la palabra “ultra” delante del término izquierda, aunque sea guerrillero o su ideología sea el Comunismo.
Eso, muchas veces lleva a ciertos dirigentes, intentar disimular el origen de su pensamiento ideológico, e intentan diluir el mismo, bajo el mote de progresista, para no ser estigmatizado.
Cada vez que eso ocurre, confunde a su electorado, y termina enredado en lo que realmente es o no es.
Eso es lo que ocurrió por ejemplo con el candidato Rodríguez Larreta en Argentina, que a pesar de tener el gobierno de Buenos Aires, un sinfín de recursos y una enorme estructura, fue el gran fracaso de dicha elección.
En cambio, candidatos que no tienen temor y personalidad, para defender con convicción y determinación, el nicho ideológico desde el que actúan, no dejan lugar a dudas quienes son, que son, y hacia dónde van. El caso de la candidata Bulrich, es un buen ejemplo.
Por eso en las próximas elecciones que el Partido Nacional tiene por delante, con socios o sin ellos, tenemos que tener dirigentes políticos que tengan muy en claro cuáles son nuestros orígenes, que somos y que queremos para nuestro país y nuestro departamento.
Y una vez que lleguemos al gobierno departamental que es el que nos ocupa en Salto, saber que la tarea más importante que tenemos por delante, es la gente, que tiene que ser el principio y fin de cualquier gobierno.
Hoy la gente en Salto está a la deriva porque quien pidió la bolada para gobernar el departamento, tiene la fantasía de llegar a Montevideo a jugar en “primera división”, y eso lo hizo ausentarse antes de cumplir la mitad de su mandato.
Si así actúan los de izquierda, no tenemos ningún empacho en expresar que somos de derecha.
Si de izquierda es tener las calles de la ciudad y los caminos del departamento en la forma en que los tienen, no tenemos empacho en decir que somos de derecha.
Si de izquierda es dejar a la gente sin transporte los domingos porque se timbearon los recursos económicos y no pueden prender los ómnibus, no tenemos empacho que somos de derecha.
Si de izquierda es mentir en que se tiene una clínica para tratar a personas enfermas con personal y funcionando, no tenemos empacho en que nos cataloguen de derecha.
Ojalá que el Partido Nacional tenga los dirigentes a la altura de las circunstancias en las próximas elecciones que sepan quienes somos, que somos y hacia dónde vamos.