sábado 18 de mayo, 2024
  • 8 am

Nicolás Albertoni, Sub secretario del Ministerio de Relaciones Exteriores “Soy parte de una generación política que entiende que para crecer tenemos que mirar para adelante y hacer”

Por Julio Aguirrezábal
Es el único salteño que integra el equipo de gobierno que conduce el Presidente Luis Lacalle Pou y actualmente ocupa el cargo de Subsecretario del Ministerio de Relaciones Exteriores. Nicolás Albertoni estuvo en Salto en el marco de una actividad política que marcó el comienzo de una nueva etapa de la histórica Lista 1 y que impulsa a Marcelo Malaquina como referente del sector. Dice ser parte de una generación que pide terreno para hacer y no estancarse en el tiempo. En diálogo con CAMBIO analizó la situación actual del Partido Colorado, las posibilidades del TLC con China y la situación económica de Argentina que repercute en el litoral uruguayo.

-Su venida a Salto coincidió con el relanzamiento de la Lista 1 del Partido Colorado con Marcelo Malaquina como líder del sector. ¿Qué “partido” juega en esta nueva etapa?
-De acompañamiento. Marcelo es una persona donde uno ve que ADN o fibra política no falta y un rumbo político donde es lindo ser parte y donde uno no se ata a nada. Es simplemente acompañar un amigo con un hito de posicionamiento que era difícil de encontrar, pero que en Salto el Partido Colorado la sigue teniendo y por eso se dio esta instancia. Una Lista 1 con una historia innegable que había tenido una etapa de estancamiento luego del fallecimiento de Eduardo Malaquina y ahora se genera este nuevo rumbo. Una nueva generación que pueda continuar.
-Su aporte al sector, supongo, no se reduce solo a acompañar. ¿Va más allá?
-Lo que pasa que actualmente a mí me toca estar en un rol nacional y respeto mucho el trabajo en la política en el departamento. Y Salto es mi departamento, y lo quiero mucho, pero si mañana uno quiere pensar la política desde el departamento hay que estar. Hoy me toca estar a 500 kilómetros y no quiero jugar a que uno está y no está. Si uno está debe estar en el terreno y si no está saber qué proyecto se va acompañar y no de una forma pasiva y generar desde Montevideo una agenda, para que una dirigencia departamental pueda avanzar. Hoy lo veo desde esa óptica. Ya vendrán tiempos electorales donde habrá que definir que es acompañar y armar la ingeniería de los roles, pero considero que hoy eso no nos debe distraer.
-La última experiencia del Partido Colorado en Salto, con Germán Coutinho, no fue buena y el ciudadano no se olvida de cómo quedó el departamento. No se recuperó con la primera administración de Andrés Lima y en este, su segundo período, se mejoró algo, pero se tiene un índice muy alto de desocupación. ¿Cómo analiza todo este contexto?
-Sí, es preocupante, muy preocupante. Creo que en la última elección el Partido no se vio en su mejor momento, aunque es real que tanto Salto como Rivera son departamentos donde se sigue teniendo una fuerte presencia, por tanto hay una buena base para seguir aportando con otras alternativas.
-La base de la que habla, hoy en Salto es tercera opción.
-Sí, pero en otros departamentos la situación del Partido Colorado es aún más compleja. Por eso creemos que potenciar otra alternativa es altamente positivo, tanto para el partido -que necesita tener una presencia importante- como para el departamento. Tener una lista pujante con tanta historia y con una figura como Marcelo Malaquina es muy positivo.
-Tuve acceso a una encuesta que me llamó la atención el índice positivo de Marcelo Malaquina, un saldo positivo muy alto, siendo que recién se inicia en la política.
-Hay que tener en cuenta que más allá de su apellido, Marcelo es un hombre que viene del deporte siendo arquero de varios equipos de fútbol y con la selección de Salto. Es una persona cercana a la política por su padre, trabajador de una chacra hortícola y muy vinculado socialmente. Cuando se hizo esa encuesta él era simplemente un dirigente más de la lista, creemos que su aprobación crecerá aún más cuando salga a la cancha.
-Usted supo mamar la política desde muy joven, incluso, recuerdo cuando iba a los actos políticos siendo niño, vestido para la ocasión y decidido a escuchar los discursos.
-¡Qué recuerdos! (Se ríe) Incluso yo iba a las sesiones de la junta Departamental cuando mi padre (Esc. Carlos Albertoni) era edil y lo vivía con mucha cercanía. La política es un oficio que hay que defenderlo si te gusta, como a cualquier otro oficio. Hay que tener en cuenta que en política se avanza hacia la búsqueda de poder y hay que saber analizar qué se hace con ese poder que uno va encontrando, por eso es muy delicado. Es muy importante la acción y el hacer en este oficio, porque además está muy cerca el desbarrancarse.
-En Salto se comenzó a formar la coalición y no hubo acción de vuestra parte, porque los dejaron afuera. Es decir se negoció entre dos y no entre todo el partido. ¿Qué opinión le merece?
-No hay ningún acuerdo cerrado. Lo que hubo fueron señales muy fuertes de políticos importantes del departamento, pero esto no se debería tomar muy a pecho. Estos dos políticos han mostrado una impronta, pero en ningún momento señalaron que no iban a trabajar con otros. Creo que esta nueva generación que se viene impulsando se va a duplicar y vamos a demostrar que sí deberemos estar en esas conversaciones. Esa es la filosofía de este nuevo grupo, duplicar en la cancha el esfuerzo para que nos llamen por naturaleza y no por gritos.
-¿Le han consultado algún aspecto con relación a la coalición?
-No, la verdad que en Salto no. Sé que Marcelo ha estado en conversaciones con dirigentes, personalmente no me han hecho consultas.
-¿Qué opina de la coyuntura económica que se está dando con Argentina?
-Actualmente es muy compleja la situación cambiaria en el litoral del país, pero es una realidad que no es nueva. Este tema ya ha ocurrido, por tanto sabiendo que esto cíclicamente vuelve la pregunta debe ser, ¿qué hacemos para depender menos? Y en ese sentido creo que la dependencia bancaria hoy ya no es la misma que a inicios del 2000. Pero ahora viene otro desafío que el Presidente ya ha puesto sobre la mesa que es la dependencia comercial en el Mercosur, donde es momento de mirar hacia afuera y abrirnos más. Es momento que desde el litoral se analice cuanto se está exportando de servicio o cuanto podemos hacerlo hacia India o China. Debemos cruzar los dedos para que a Argentina le vaya bien y mejore y no tomar estos procesos cíclicos como nuevas sorpresas, sino aprender.
-¿Cómo va a repercutir la baja del dólar en los sectores productivos y de exportación?
-El impacto es natural. Hoy tenemos un gobierno con mucha conciencia y cercanía con el sector exportador que sabiendo los parámetros que el Banco Central tiene, acciona para que el impacto sea lo menos posible. Lo más complejo en estos escenarios cuando el tipo de cambio está tan atrasado es cuando hay una desconexión en el diálogo entre empresarios y el gobierno.

“Soy muy optimista en lograr un
TLC con China, porque el Gobierno está trabajando para eso”

-¿La Cámara de Industrias y los exportadores le pidieron asesoramiento en su momento sobre la importancia de un TLC con China?
-Hoy me toca estar con otro sombrero, desde el ministerio, pero sigo creyendo que es muy importante. De hecho el Canciller Bustillo fue el primer ministro latinoamericano en visitar China después de la pandemia, lo cual demuestra que somos un país que cumple. No se han visto concreciones, pero el tema es que en política exterior no es solo lo que un país quiere, sino, lo que el mundo le permita. Lo importante acá es que hay un cambio de rumbo y el querer está sobre la mesa y actualmente se está trabajando proactivamente en lograr mayor exportación.
– Próximamente viaja a China para seguir el tema.
-Sí, en agosto, a través de un trabajo que se viene haciendo donde hay una comisión bilateral que por aspiración del Presidente se va a reflotar para avanzar en el tema. De hecho junto con el Presidente y como ministro interino me tocó recibir a un enviado del Presidente chino donde le presentamos la importancia que el Presidente Lacalle vaya antes de fin de año a China y lograr sellar todo lo que se pueda manteniendo el objetivo.
-¿Es optimista?
-Muy optimista. Porque siempre estuve en este debate y si uno compara –en política exterior- el gobierno anterior a esta altura, el debate del día a día, era si Venezuela era una democracia o una dictadura y algunos incluso no se animaban a decir que era una dictadura. Hoy por lo momentos que se viven, recorriendo el país, te consultan como van los acuerdos para abrir los mercados y eso es muy bueno.
-¿Su afinidad con Lacalle Pou es ideológica o generacional?
-Ambas. Viviendo en Estados Unidos, cada vez que venía al país, siempre se daba una charla con él cuando era Senador y eso fue generando una cercanía que hoy en la acción uno lo ve. En cuanto a lo ideológico, uno sigue teniendo, más allá de la coalición, una visión común del gobierno al margen de los matices que puede haber. Yo quiero ser parte de una generación política que entienda que para crecer como país tenemos que mirar hacia adelante y hacer. Actualmente es necesario dinamizar al departamento de Salto, pero para eso es necesario tener nuevas ideas y acciones y en ese sentido está naciendo una generación que pide cancha.