Nazareno Rodríguez se va a España con la valija llena de ilusiones

Nazareno Rodríguez tiene 17 años, se formó en Progreso, fue campeón del interior con la selección sub-17 de Salto en 2020 y por último estuvo en inferiores de Peñarol de Montevideo. Hoy, gracias a una empresa europea que lo estaba observando, cargó la valija de ilusiones y en medio de muchas emociones emprendió rumbo a Europa. Antes de dejar su tierra dejó sus sensaciones a CAMBIO.
«Muy contento por la oportunidad que se me dio, con una empresa de gallegos que me venían siguiendo. Ahora tengo la oportunidad de probar mi suerte en Europa, no sé bien en qué cuadro porque la empresa trabaja para diez equipos importantes de Europa. Los clubes que recuerdo: Málaga, Udinese, Cagliari, Porto, Real Sociedad, Dínamo, Sporting de Lisboa. Hacía ocho meses me venían haciendo un seguimiento desde que estaba en la selección sub-17 de 2020. Después se me empezaron a abrir las puertas. Cuando me fui a probar en Peñarol tuve unos inconvenientes, volví y me hablaron que había una propuesta de España para jugar en Europa. Tuve que elegir entre Peñarol y esa propuesta; elegí esa, creo se me van a abrir más puertas. Me voy el domingo (hoy) a Montevideo y el lunes a mediodía parto desde Carrasco rumbo a Madrid, donde me esperan esos empresarios».
«Voy junto a dos chicos más, uno de Bella Unión que está en Peñarol, y otro chico de Colonia que está en Defensor Sporting. Tengo 17 años y mucha ilusión de triunfar.
DESDE PROGRESO
«Me hice en Progreso, en la selección campeona de sub-17 de Salto. Jugaba de puntero o enganche, también jugué de ‘9’. A los 15 años Pablo Cincunegui me ascendió a primera; él me conoce desde el baby fútbol y formativas de Progreso. Me dio la oportunidad de llegar a la selección de Salto sub-17. El haber estado en Peñarol me deja un lindo recuerdo. Quedé encantado con un club profesional, es jugar a otro nivel, como la cuarta de Peñarol. Por eso le decía a mi viejo ‘quiero jugar en Peñarol’, porque no salía esta propuesta de España. Ahora sí, haciendo las valijas, contento, no lo puedo creer, espero que me vaya bien».
«En este momento pienso en cuando era chico, en la gente que me armó como jugador de fútbol, tanto en el baby como inferiores de Progreso, en la gente que siempre me dio un empujón para que saliera adelante, pienso en mis compañeros de Progreso y la selección. Todo esto es trabajo, disciplina y mirar siempre para adelante. Agradecezco a mi viejo. Al principio no quería ir pero él me dijo ‘queda tranquilo que allá es otra vida’. Después hay mucha gente grande del club que me aconsejó también, que era lo mejor para mí, donde la experiencia vale ante todo y la valoro mucho».