martes 7 de mayo, 2024
  • 8 am

El bochinchómetro de la izquierda

Gustavo Varela
Por

Gustavo Varela

168 opiniones

Por Gustavo Varela
Las campañas electorales son los momentos donde surge un sinfín de situaciones que realmente asombran aún al más preparado, con personajes reales y ficticios, que dejan ver lo mejor y lo peor del ser humano.
Hace muchos años se podía hablar de Tortorelli, con sus carreteras en bajada o con sus célebres canillas por donde saldrían litros de leche. O más cerca en el tiempo, Pinchinatti, donde Ricardo Espalter, aquel inigualable cómico que tanto nos deleitó, con su personaje ficticio, que igualmente llenó un Palacio Peñarol en la elección del 83.
Sin embargo el paso del tiempo ha hecho desaparecer esos personajes, para dar lugar a lo peor de la realidad política, como lo que se ve actualmente, donde la izquierda se destaca en su afán de no perder ninguna elección.
En la República Argentina, están a menos de un mes de celebrar elecciones, bajo un clima social y político muy tenso, por la situación que el Presidente Fernández y su Vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner con sus políticas erráticas “progresistas”, han llevado al país hermano ser una de las peores economías del mundo.
A pesar de estar a punto de estallar siguen derrochando con su “plan platita”, dinero que lo hacen aparecer, mágicamente, de las impresoras gubernamentales, que es lo único que hacen trabajar a full.
Lo peor es que los “colectivos sociales”, aquellos que están haciendo piquetes permanentemente sobre la Avenida 9 de Julio porque no aguantan más la crisis, porque están con hambre, y miles de argumentos más, anuncian que van a realizar una marcha en apoyo al gobierno y en repudio de un posible gobierno de la oposición, a la que se les va a plegar la poderosa CGT, homónima de nuestro FA-Pit, protestando por si gana la oposición. ¡¡¡Sí, así como lo leen!!!
Los gremios no protestan contra el gobierno que llevó a la economía a más de un 125 % de inflación anual, y en cambio repudian lo que todavía no existe.
Recordemos que acá en el Uruguay ocurrió que la central obrera, manejada por los ultraizquierdistas comunistas y emepepistas, también llevaron a cabo un paro por si el Partido Nacional ganaba la última elección. Por lo que se ve, no obtuvieron mucho resultado.
Lo mismo pasaba con Lula en la elección que ganó. Recordemos que la ultraizquierda brasilera, denunciaba como un criminal de guerra a Bolsonaro, por la desforestación del Amazonas, y hoy, el propio Lula está anunciando que no va a dejar de deforestar a pesar de la oposición europea, y todo lo que conlleva un acuerdo comercial con la Unión Europea.
Todos esos movimientos que vemos protestar por cualquier cosa, debemos de saber que lo hacen con un fin político que es llevar a la ultraizquierda al gobierno.
Aunque quieran mostrarse como independientes, no hacen más que defender a aquellos que después los llenan de dinero para hacer marchar la calesita del derroche.
Hoy se desarrolla en Montevideo la marcha de la diversidad, bajo el lema que lo eligió con toda seguridad la cúpula protestataria de “no al recorte de los derechos”. ¿Alguien vio que se ha recortado algún derecho?
El FA-PIT llama a firmar contra la reforma jubilatoria recién aprobada, porque dice que va contra los derechos adquiridos y además para voltear las AFAP. Todos nos preguntamos, después que estuvieron 15 años, ¿recién se vienen a acordar?
No te comas la pastilla.
Es el bochinchómetro que lo han puesto a jugar a favor de la ultraizquierda que quiere retornar al gobierno.