A diferencia del verano pasado, las olas de calor más importantes se han venido registrando en este final del verano, por lo que los técnicos del Instituto Plan Agropecuario (IPA) recuerdan algunos de los manejos recomendados para el ganado vacuno, de manera de mantener el bienestar de los ganados y evitar pérdidas de producción.
La Dra. Valentina Herrera, técnica del instituto, recordó que en momentos donde las temperaturas alcanzan su pico, el bienestar del ganado debe ser prioritario. Por lo que enfatizó en la importancia de ajustar los horarios de manejo a momentos del día más benignos climáticamente. «Tratar de no estar en las horas pico de calor, o sea entre las 10 de la mañana y las 16 horas de la tarde,» sugiere, recomendando llevar a cabo actividades como vacunaciones o traslados, ya sea temprano en la mañana o avanzada la tarde.
Un punto crítico que resalta Herrera es garantizar que, independientemente de las circunstancias, el ganado tenga acceso constante a agua fresca y abundante, así como a áreas de sombra. Este acceso no solo es un derecho básico sino una necesidad imperativa para prevenir el estrés calórico severo en los animales.
Cuando se trata de embarcar el ganado, sea para traslados entre campos o hacia plantas frigoríficas, la planificación del horario es crucial. «Organizar… cuando va a ser el horario de la carga…y de la entrada organizar con el frigorífico,» apunta la Dra. Herrera. La meta es minimizar el tiempo que los animales pasan en tránsito durante las horas más calurosas, evitando así exponerlos a estrés adicional.
Herrera recordó la disponibilidad de herramientas tecnológicas para la gestión del estrés calórico, como el ITH que permite anticipar las condiciones de estrés calórico. «Hoy en día existen herramientas…que nos va a dar el grado de estrés calórico…con una anticipación de siete días,» destacó.
Las recomendaciones de la Dra. Valentina Herrera subrayan la importancia de un manejo sensible al bienestar animal, especialmente en épocas de calor extremo. La anticipación, junto con la implementación de prácticas de manejo adecuadas, puede significar la diferencia en la salud y productividad del ganado.
