En el norte del país, varios campos se visualizan con importantes problemas de falta de agua. Principalmente aquellos campos superficiales, que ya muestras pasturas amarillentas.
Pero lo más preocupante para los productores agropecuarios es la pèrdida de las aguadas, donde las cañadas falsas o cursos de agua con cuencas reducidas, ya están secos.
Si bien los productores arroceros esperan transcurrir la cosecha, que ya ha comenzado en el norte, sin lluvias y bajas temperaturas, desde los demás cultivos de verano, la necesidad de lluvia se hace presente, principalmente por el bajo nivel de agua presente en el perfil del suelo.
De acuerdo a un mapa divulgado por el Instituto Nacional de Meteorología (INUMET), en la última semana el nivel de agua disponible en los suelos, lo que ha encendido alarmas en el sector agrícola.
Esto es consecuencia directa a la sequía que se instaló en fines de diciembre y todo el mes de enero, donde las lluvias fueron prácticamente nulas en el sur del país, y un poco más regulares al norte. Esto se da, sumado a altos niveles de temperaturas durante varios días, lo que generó una evapotranspiración de fuerte impacto, que complicó aún más el escenario.Durante la última semana se dieron algunos eventos puntuales de precipitación, pero fueron seguidos de temperaturas superiores a los 32ºC, por lo que la situación no ha cambiado.
