martes 14 de mayo, 2024
  • 8 am

«Mis goles fueron la anécdota, Hindú tenía un cuadrazo»

Salto ha tenido y mantiene su casta de sembrar buenos jugadores de fútbol y este espacio lo ha reflejado. En la selecta lista hoy repasamos la carrera de Domingo Rufino Caceres, el ‘Bomba’, quien llegó a integrar selecciones uruguayas y a triunfar internacionalmente.
«Nací un 7 de setiembre (1959) en el barrio Independencia, en calle 15 de Noviembre (Herrera) y Bella Vista, a una cuadra del club Independencia, donde habían jugado mi padre y mis tíos, por eso era hincha, y además jugaba mi hermano. Pero un vecino mío, Enrique Flores, me lleva a Hindú con el ‘Bicho’ Da Silva, quien también con él seguía a Hindú desde comienzo de la década de los 70′. Por eso también me hice hincha de Hindú y ahí sí termino jugando».
«Como todo gurí jugaba al fútbol en la calle, en la esquina, en un campito, con una pelota de trapo, de plástico, con la que tuviéramos. Siempre cuento que con 12 o 13 años nos juntábamos con varios vecinos e íbamos a jugar a una cancha grande que existía donde hoy es el barrio Fátima. Ahí jugábamos al costado de la laguna, 15 o 20 para cada lado, y jugar con grandes me hizo madurar».
«En mis comienzos jugaba como delantero, puntero derecho o izquierdo, pero en el campito jugaba en todos los puestos. De niño me gustaba atajar, en mi ilusión de niño yo era Ladislao Mazurkiewicz, el de las grandes hazañas de Peñarol. Mi abuela era muy fanática de Peñarol, me daba 10 centésimos para que yo hiciera de antena, cable a tierra para que se escucharan bien los partidos en las radios de Montevideo. Lo que es la vida; en 1980 tuve la oportunidad de integrar plantel y jugar con él (Mazurkiewicz) en Peñarol, ya en el final de su carrera y yo recién dando mis primeros pasos en el profesionalismo.»
«En el baby fútbol jugué en Estudiantil donde el ‘Vasco’ Benítez, que era del barrio y formó ese club donde fuimos todos los gurises del barrio y el premio que nos daba cuando ganábamos era un plato de tallarines con estofado que hacía la madre. Nos jugábamos la vida! Luego pasé a los Náufragos, que dirigía Joselo Suárez, porque Estudiantil no tenía sub-13 en cancha grande, que era la última categoría, y jugué ese año con Hugo y Ricardo González, que después terminaron jugando en Hindú. Había una camada de buenos jugadores, de ahí salieron jugadores Deportivo los Bordenave. Con 14 empecé a jugar en la cuarta, tercera y reserva de Hindú. Empecé de lateral y terminé de zaguero. Me tocó salir campeón con la tercera, que era en ese entonces el salto a primera. Hasta que me citaron para primera, donde la pareja de centrales era Maidana y Paulino, que venían de salir campeones salteños de 1971 con Hindú, entonces empecé como lateral derecho, el izquierdo era Obdulio Amaro. En el 77′ se formó un cuadro muy juvenil acompañado por algunos veteranos que quedaban y se hizo una gran campaña y ahí empiezo a jugar como zaguero central. Ese año terminamos terceros en el Campeonato Salteño. Estuve en una selección juvenil que dirigía Heber Diez integrada por muchos jugadores de Salto Uruguay, porque él dirigía las inferiores de Salto Uruguay. En esa selección estaba el ‘Pepo’ Goncalvez Brun, el ‘Corcho’ Roux, ‘Sapo’ Acuña, Ruben Peña, Italo ‘Yayo’ Ortíz, el ‘Mono’ Invernizzi. La final nos toca con Artigas que después sale campeón nacional juvenil con Venacio Ramos, Mario Saralegui, Ruben Paz, Manolo Anzorena, Oscar Aguirregaray, que después terminan en Peñarol».
EL PASO A PEÑAROL Y LA SELECCIÓN
«En febrero del 1978 por intermedio de Amado Goncálvez me relacionan con Peñarol de Montevideo. Justo viene de paso a su ciudad Cabellos, el ‘Tito’ Goncalvez y me lleva a Montevideo. Tuve problemas con el pase, Hindú quería que viniera el primer equipo de Peñarol a jugar a Salto y quedarse con la recaudación, pero Peñarol quería mandar una tercera división, lo que trancó el pase un mes más, hasta que me dieron el pase igual y a los cuatro meses de jugar en Peñarol me citaron para la selección juvenil que se estaba preparando para el Sudamericano y Mundial de Japón 1979.»
«Venía de salir campeón con la cuarta jugando 10 partidos. En 1979 empiezo como titular en la selección juvenil en el Sudamericano que fue en Uruguay y salimos campeones. Jugamos dos veces con Argentina de Maradona y Ramón Díaz, el primer partido ganamos y el segundo empatamos, clasificaban tres al mundial y fuimos nosotros, Argentina como segundo y Paraguay de Romerito tercero. Hicimos un gran campeonato».
LA RECORDADA FINAL CON HINDÚ ANTE LA ‘U’
«Había hecho una amistad muy grande con Iván Botti. Cuando era gurí el primer bolso con lo que sobraba de los pantazotes siempre iba a su trabajo. Cuando él iba a Montevideo iba a mi casa y surge la idea de reforzar a Hindú. Universitario se reforzó con Euler Correa, que había jugado en inferiores de Peñarol y en Basáñez. Y vengo a Hindú a ese partido del que hasta hoy se sigue hablando. Llegué para el partido, siempre digo que tuve suerte porque los goles son la anécdota, Hindú tenía un cuadrazo y podría haber salido campeón sin mí. El año anterior habían quedado en la puerta y no querían que se les escapara. Universitario tenía gran equipo también. Fue un partido muy parejo, lindo, los dos fueron al frente. Venía de hacer goles en Racing de tiro libre, el primero estaba lejos y le pegué, la pelota agarró comba y bajó. Otro fue de 40 metros, ni barrera armaron, y el otro de 35 metros. El primero entra por el medio, el otro más contra el palo, hice uno de penal pegándole fuerte, y uno de cabeza. Ganábamos 3 a 1, en la hora nos empatan cuando ya estábamos haciendo caravana.»
«En el alargue nosotros con 9 jugadores por expulsión de dos compañeros y en los 15 minutos del alargue el ‘Corcho’ Roux de penal pone el 4-3. En un partido parejo pasamos a perder y con 9 hombres en cancha, pero en una patriada el ‘Chino’ Viera hace el gol más importante, pone el 4-4. Sin ese gol no tendríamos aire para pelearla hasta el final. Con el empate íbamos a aguantar hastalos penales. En una pelota larga Viera corre, la aguanta en el banderín del córner y justo se la puntean al córner. Y ahí dije ‘yo con el resto voy a cabecear’. Cuando Viera levanta el córner yo amago ir al primer palo y Euler Correa no me sigue, ahí yo entro por el punto penal y con golpe de cabeza anoto el 5 a 4 final».