miércoles 1 de mayo, 2024
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¿Qué podemos esperar en Argentina?

Estudio Signorelli & Altamiranda
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Estudio Signorelli & Altamiranda

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Por Joaquín Forrisi
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Es preciso recordar que las antriores Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) de 2019 en Argentina, con la participacion del actual presidente Alberto Fernandez y el ex mandatario Mauricio Macri tuvo un efecto devastador en el mercado financiero, cuando, al igual que en este caso, las proyecciones de las encuestadoras de opinión pública no tuvieron aproximación con lo que aconteció en la realidad. La inesperada elevada votación del sector liderado por Fernandez repercutió rápidamente en los mercados, los bonos se desplomaron y la cotización del dólar, que estaba prácticamente unificada y era libre, se disparó un 23% en un día. En 2023el resultado de las PASO sorprendió a propios y extraños. Es difícil saber con precisión que esperaban los mercados, pero existe cierto concenso de que estos descontaban una victoria del espacio político Juntos por el Cambio, y una buena votación, próxima al 15%, del nobel espacio político La Libertad Avanza, liderado por Javier Milei. Sin embargo las encuestadoras de opinión volvieron a estar lejos de los hecho. La Libertad Avanza obtuvo el 30,5% de los votos, siendo el partido más votado y consagrando un escenario de tercios con Unión por la Patria -28%- y Juntos por el Cambio -29%-.
En un escenario de tercios, uno de los principales desafíos de quien logre el Gobierno en octubre es la gobernabilidad. Ideas cómo la dolarización o el ajuste de los subsidios requieren de concenso parlamentario mientras que otras medidas cómo unificación cambiaria o desregulación del comercio exterior requieren de amplio concenso social, ya que de estas medidas, dada la distroción de precios relativos con la que conviven los argentinos, el escenario de disconformismo social es probable. El oficialismo, procurando cumplir con una máxima en los países de América Latina, en la que Gobierno que devalúa no gana las elecciones, dilató hasta el lunes 14 de agosto la devaluación de la moneda, sin embargo no logró evitar ser la tercera fuerza electoral. El Gobierno devaluó el peso un 18%, hasta las 365 pesos argentinos por dólar, lo que arrastro también las demás cotizaciones, llegando el dólar «blue» a 780 pesos argentinos. Además, buscando que esta devaluación no se traslade a precios y las expectativas cambiarias estén ancladas, el Banco Central de la República Argentian (BCRA) subió la tasa de interés 20% hasta 118% nominal, lo que implica un 209% efectivo anual.

En un escenario incierto sobre el futuro, con probabilidades de victoria de 3 partidos políticos, los escenarios son múltiples. La unificación cambiaria que propone Juntos por el Cambio evidenciará con seguridad ciertos problemas de competitividad de las empresas uruguayas que exportan a Argentina. El escenario de dolarización -con una evantual desaparición del BCRA-, propuesto por La Libertad Avanza, requiere de un complejo acuerdo político además de las restricciones de acceso a la divisa estadounidense, lo que genera más incertidumbre que certezas. A corto y mediano plazo, es esperable que la diferencia de precios con Argentina se mentenga o acentúe. Será necesario conocer el plan de estabilización macroeconómica de quien resulte electo oficialismo así cómo la composición del Congreso para conocer que tanto tiempo se mantendrá.