Por Gustavo Chiriff
Esta célebre frase fue pronunciada por la vice presidenta Argimón, en otra ocasión, donde en esa instancia también se quiso minimizar los horrores de este gobierno multicolor; en el caso actual, de ocultamiento de información sobre el caso del narcotraficante Marset, vemos a varios integrantes del gobierno, plagiar a la vice presidenta, tratando de hacer parecer que acá no paso nada.
La gente está cansada que estén pasando estas cosas en un gobierno, que con muchos cohetes anuncio, que venían a cambiar la forma de hacer política, de que íbamos a vivir los mejores 5 años de nuestras vidas, sin embrago vienen pasando cosas que muestran una vez más la forma de hacer política de los gobiernos de derecha, corrupción, amiguismo, acomodos y fraudes.
De las cosas que vienen pasando podemos nombrar la entrega del puerto de Montevideo a la empresa Katoen Natie, por 12 periodos de gobierno (hasta 2081), un negocio absolutamente desfavorable para los intereses nacionales y representa la mayor entrega de soberanía de la historia nacional. Otro negocio “formidable” de este gobierno multicolor.
Pero también paso la contratación de una agencia de publicidad extranjera fantasma, por parte del Ministerio de Turismo (en plena pandemia), donde rodo la cabeza del entonces ministro Germán Cardozo y después a barrer bajo la alfombra. Paso el caso Astesiano, donde desde el piso 4 de la torre ejecutiva (donde esta presidencia), existió una asociación para delinquir, que operaba impunemente, entregando pasaportes, coimeando y persiguiendo a militantes de izquierda, entre otros delitos.
También han pasado cosas, como la entrega de viviendas por parte de la ex ministra de Vivienda Irene Moreira a militantes de Cabildo Abierto, los abusos de funciones en el Ministerio del Interior que han costado varias renuncias, la estructura política que se ha montado en ASSE con acomodos partidarios, los grados de corrupción denunciados en varias Intendencias blancas (clientelismo y nepotismo), el caso Penadés, con 22 delitos imputados entre abusos sexuales y violaciones.
Recientemente se supo de otra cosa que paso y fue acá cerquita, en CTM Salto Grande se denunció clientelismo político, donde su ex presidente, Carlos Albisu, benefició a sus más allegados ediles del Partido Nacional, con cargos en esta Comisión, donde el parlamento pidió que renunciaran y la mayoría se negó.
Pero la cosa más fea que paso recientemente, es el engaño que el gobierno le realizo al parlamento, sobre el caso del narcotraficante Marset, donde oculta información y desapareció evidencias, costando nuevamente la “renuncia” de dos ministros.
Hay muchas más cosas para contar, pero tendríamos que pedirle al director del diario doble página, ante la cantidad de “cosas” que este gobierno viene cometiendo, y creo que en cualquier momento sale un libro sobre esto.
Para que estas cosas no sucedan, no hay otro camino de cambiar este gobierno de coalición, que a través de su propio accionar y de sus socios, ha demostrado que no están preparados para gobernar para el pueblo, que siguen con sus viejas prácticas, pero potenciadas como se ha visto.
Por qué otro Uruguay es posible, no hay que olvidar a la hora de elegir, todas estas cosas que pasaron y están pasando.
