Desde niño hasta hoy vive y disfruta del fútbol con mucha pasión. Se formó en el ‘campito’ y siguió en inferiores de Salto Uruguay, donde debutó con 15 años en primera. Ganó seis ‘Salteños’, integró selecciones desde el baby, juveniles salteñas y con la mayor fue campeón del Litoral, tuvo la oportunidad de jugar en el profesionalismo pero no estaban dadas las condiciones. Es José Alberto ‘Moncho’ León, que en diálogo con CAMBIO contó su historia en el fútbol y la enseñanza de vida que éste le dejó.
«Nací en el barrio Cien Manzas en la esquina de la sede de Tigre, enS olís y Acuña de Figueroa, pero con seis años nos mudamos con mi madre a la casa de mi abuelo en barrio Salto Nuevo, Avenida Solari 1180, cerca de la Capilla Santa Filomena. Ahí con los curas jugábamos al fútbol, en los primeros recuerdos de niño. Se juntaban muchos niños de la zona y compartíamos amistad y jugar a la pelota, como decíamos en aquella época. Un día el cura nos dio una pelota de básquetbol, pero nosotros en la semana jugábamos al fútbol en la calle, hacíamos arcos de caña al costado de la capilla, en calle Arerunguá y Larrañaga.
«Hoy esas cosas se perdieron. De ahí salían los grandes jugadores, después con unos años más como vivía cerca de donde empecé a jugar, en la cancha de Dublín, al costado del puente Sarandí, y también a pocos metros estaba la cancha de Salto Nuevo, jugué los campeonatos relámpago que reunían a grandes jugadores, en época que no había fútbol de 12 o 13 años. Cuando mi madre no me veía, porque no me dejaba jugar con gente grande por temor a que me lastimaran, podía entreverarme, aprender como jugador y adquirir experiencia. Por eso jugué muy joven en la primera de Salto Uruguay.
«Después con 13 para 14 años me incribí para jugar en la Liga Salteña de Fútbol, en Salto Uruguay, en esos tiempos en la cuarta que dirigía Don Heber Diez. También estaba en las inferiores el ‘Pepo’ Goncálvez Brum, que fueron mis comienzos. A mitad de campeonato, en un partido con River en el Ambrosoni perdíamos 0-2 con River y el ‘Pepo’ me miró y me dijo que entraba; y entré e hice dos goles y ganamos 3 a 2. A mí siempre me gustaba jugar como volante, manejar la pelota y distribuir el juego, pero en ese partido me pidieron jugar de puntero recostado a la raya.
«Al año siguiente estaba como suplente en un partido con Salto Nuevo en el Julio Pozzi, ellos con un cuadrazo, el golero era el ‘Negro’ Montes, los centrales Betteato y Racedo, una defensa que hacía años venía jugando juntos. Perdíamos 0-1 y el ‘Macho’ Alfieri, que era el técnico de primera, en el entretiempo me llama y me dice ‘vas a entrar vos pero de puntero derecho, jugá por la raya, aprovechá tu velocidad, ellos se van a cerrar y hay que abrir la defensa’. Hice un gol empatamos y terminamos ganando 3 a 1».
SALTO URUGUAY DEL ’80
«El Salto Uruguay de 1980 para mi fue inolvidable. Cuando llega ‘Pirulo’ Da Cunda al club teníamos una base formada desde abajo, en la cual estaba yo, pero llegó el ‘Yuyo’ Da Silva, el ‘Pato’ Yaque, el ‘Gringo’ Cavani. Tuve muchos técnicos, porque gané seis campeonatos en 8 años, como el ‘Pichu’ Vargas, el ‘Quique’ Bruno, el ‘Macho’ Alfieri, ‘Coyungo’. Esa decada del 80′ hoy permanece más que nunca en la historia del club, en esa época había que ganarle a Deportivo, por los equipos que tenía, jugadores de selección. Todo el año fuimos cabeza a cabeza, habíamso empatado por el Salteño y en el último partido de la liguilla en el Estadio estábamos 1 a 1 en un partidazo y en la hora me tocó hacer el gol del triunfo que significó el campeonato; yo era muy gurí todavía».
«Después jugamos la Copa de Clubes de OFI y perdimos en semifinales. Ganamos un Campeonato del Litoral de clubes y nos quedó en el debe en esa década era haber ganado la Copa de Clubes del Interior».
«Siempre digo que Salto tiene todo para tener un cuadro profesional. Salto tiene una ciudad muy grande para el interior, jugadores que triunfan en el profesionalismo y a nivel juvenil siguen saliendo buenos jugadores. De las últimas selecciones juveniles la mayoría fue a jugar a Montevideo y ellos podrían integrarse a un equipo profesional de Salto. Todo está en la parte directriz, en una buena organización, además el fútbol uruguayo no tiene un nivel alto como para marcar la diferencia. También está la parte turística, hotelería, restaurantes, que crecerían, es una ciudad con muchas cosas que se beneficiarían. Como exjugador y hombre de fútbol, me gustaría la vuelta de Salto al profesionalismo».
«Un mensaje a los jóvenes, que para llegar y mantenerse, que es lo más dificil, en la vida uno debe ser muy ordenado, más ahora que estamos jugando contra algo muy feo como la droga. Entrenar al máximo, ocupar la vida en el deporte, en este caso el fútbol, escuchar consejos de los mayores, algo que siempre hice a pesar de no tener un padre que me aconsejara. En Salto Uruguay escuché a grandes personas como Heber Diez, Amalio Bassano, José Boada, pensamientos sanos, que es lo que cambia la vida».
